21 mayo 2008

Pulso


El recodo es siempre igual
a veces suena como un ronquido nocturno de Dios
inspiración del infierno. Tus golpes emiten siempre la misma vocal
en formas cerradas se te pronuncia
con horribles posiciones, y entre golpes, te tocan cuando nos vamos.
Si te marchas conmigo,
ambos por tres veces chisporroteamos
como la cara plana y diáfana
que esconde el desierto.

No hay comentarios: