06 agosto 2008

Parasito y Cosa


Juventud es fatalidad; imposible tener sueños
Dios siempre provee, pero tambien olvida.

Soy el niño muerto
devorado por la tumba del gusano materno,
mis llagas develan con voz propia
el cuento del oro viviente bajo tierra.

Un globo se escapa
abofeteando el cielo con un insulto fetal,
un ovillo se deshace, e indecentemente se muestra
bajo su diestro pie, sobre la cúpula de la tierra.

Una queja se desenvaina
e implota causándole una herida a su suelo,
desciende el angel de los tuertos, con un solo puente,
la muerte no es mas que un retrato en el aire.

Mi boca infectada
es la carne que en su carne se devora
mientras sarcófago en tu vientre es derretido
y en mi consumación tu victoria que otrota.

Soy el sueño negro
que soportas en brazos, mares y ojos
te devanas cantando en tu gloria
mientras planto versos y cosecho historias.

Recuerda: Soy tu parásito y tu cosa.

1 comentario:

Ismael Ogando dijo...

pidele disculpas a tu pulgar derecho, el no tiene la culpa.