¿Poema al silencio?

Callando un secreto, y se revuelve el tiempo
que da paso a la deseo y la ira.

Callando un secreto, y el cielo cae desnudo
sobre la panza de los mortales.

Callando un secreto, y los besos ahogados del mar
duermen bajo las furias.

Una furia
dos furias
tres furias
¿Cuántas furias se necesitan para ser mortal?

¿Cuántos deseos hacen falta, para que este escrito
fuese considerado una oración?

¿Cuántas bocas deben de gritar, para pichar el cielo
y que caiga un ángel sobre el asfalto?

¿Cuántos golpes debemos darnos para ser puros?

¿Cuántos clavos incrustados a brazos y pecho para ser Salvador, Mesías, Enviado, o quizás el hijo de aquel cuyo nombre de debe ser nombrado?

¿Y la lanza? Dejamos que nos la claven o la tomamos en mano autoproclamándonos guerreros, walkirias, o cualquier otra cosa que se le parezca.

Oh, el silencio ¿Cuánto silencio hay que hacer, cuanto, cuanto cuanto?

El Silencio aturde las calles
bajo una lluvia templada
de mi hogar ciudad desierta;
su rugido baila con el ángel sobre el asfalto.

El Silencio aplasta corazones
volviendo pesadas sus lenguas
mientras dormita con los ojos abiertos
confundiendo su realidad.

El silencio baja despacio;
se clava en el aire que acaricia
sembrando un eco de sombra entre los pasos;
mientras taciturno nos invita a tomar un café.

Es… El silencio… Todo o nada.

¿Será el sonido de unas voces calladas?
¿El secreto de la verdad absoluta?
¿Un grito imperceptible?
¿La voz que divulga un secreto divino?
¿O simplemente… La voz de Dios?

Shhhhh….. ¿Silencio?


Todos los derechos reservados